Alvaro Aragón Ayala.
El gobernador Rubén Rocha Moya llamó a la comunidad universitaria a expresarse con libertad en la consulta que se desarrollará este viernes sobre la reingeniería administrativa de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS), la cual ha levantado polémicas y expectativas por el tema de la jubilación dinámica.
El Rector Jesús Madueña Molina recurrió al aval al Consejo Universitario para aplicar la consulta, para saber si los universitarios apoyan o rechazan cambios profundos en la institución atrapada en una aguda crisis atribuida por las autoridades federales al pago de la prestación de retiro.
El mandatario estatal expresó su respeto a la decisión que adopten las y los universitarios, al tiempo que subrayó la importancia de que la resolución se oriente a los intereses de la universidad y los derechos de los trabajadores.
“Que se manifiesten libremente y que resuelvan lo que corresponda a ellos, a los intereses de la institución y de los trabajadores”, señaló Rocha Moya, al reiterar la disposición del gobierno estatal para escuchar y respetar la voz de la comunidad universitaria.
En la vida democrática de la Casa Rosalina, la consulta representa un paso relevante en el proceso de transformación institucional, pues busca fortalecer la administración y funcionamiento de la UAS acoplándola a los nuevos tiempos.
La participación activa de la comunidad universitaria y la de los jubilados, que ya no pertenecen a la UAS, pero que cobran a la institución una jubilación que la SEP considera extralegal, será clave para que la reingeniería responda a las necesidades de la institución educativa.
Las reformas son necesarias: de un total de 35 universidades públicas estatales de México, la UAS es la única que, por carecer de un Fideicomiso o Fondo Pro-Jubilación, sostiene el pago de la jubilación dinámica con recursos que toma directamente del presupuesto o subsidio que le otorga la Federación y el gobierno del Estado.
El gobierno de Claudia Sheinbaum Pardo lanzó un ultimátum a la Secretaría de Educación Pública y a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para que convocara a la Casa Rosalina a que cambie su viejo “modelo” de jubilaciones para que vayan quitándole la carga financiera, total o parcial, que representa el pago de las prestaciones de retiro.
En la Universidad Autónoma de Sinaloa, de acuerdo a un estudio actuarial de la SEP y de las declaraciones del Subsecretario de Educación Superior, Ricardo Villanueva Lomelí, no hay un sistema propiamente estructurado de liquidación de jubilaciones, únicamente se toma el dinero del subsidio para cumplir con un convenio contractual.
Más aún: es por partida doble. La Casa Rosalina paga un salario íntegro, completo, como si continuara trabajando al trabajador en retiro, quien, además, recibe la pensión/jubilación del IMSS. En el caso de la UAS, una de las prestaciones recae directamente la Universidad provocándole un “boquete” económico-financiero.
En todas las Universidades Públicas Estatales con jubilaciones dobles o complementarias, excepto en la UAS, se han constituido Fideicomisos o Fondos que ayudan a sostener el peso de las jubilaciones debido a que el gobierno federal -SEP y la SHyCP- no aporta recursos para cubrir este beneficio.